El experimento
Los investigadores de este proyecto, cambiando los trajes negros y las gafas de sol por batas blancas de laboratorio y gafas de seguridad, inyectaron un virus adenoasociado sobre el cerebro de ratones que luego expresa una proteína fluorescente y es así como se obtuvo un control total sobre la consolidación de información en cualquier parte del cerebro y en cualquier momento. Cuando se expuso a la luz, el virus libero un oxígeno reactivo que bloqueo la cofilina.
Durante este experimento, los roedores fueron expuestos a la luz en dos ocasiones: la primera después de haber aprendido una tarea concreta y la segunda, mientras dormían después de haber aprendido la tarea.
El resultado del experimento
Los ratones perdieron por completo la información aprendida. “Fue sorprendente que la eliminación de actividad cerebral y nerviosa local mediante iluminación dirigida, borrara la memoria”, subrayó Goto, se espera que puedan continuar con las investigaciones ya que su deseo es que se pueda encontrar una utilidad en los seres humanos.
Por su parte, el coautor de la investigación, Yasunori Hayashu, apuntó que esta nueva tecnología pueda proporcionar un método para aislar la formación de la memoria, tanto temporal como especialmente en el cerebro a nivel celular.
Las anomalías relacionadas con la potenciación a largo plazo están implicadas en trastornos de la memoria, como el Alzheimer, así como también en enfermedades psiquiátricas como la esquizofrenia.
“Esperamos que nuestro método conduzca a una serie de tratamientos para los trastornos mentales” concluyó.
Definitivamente este experimento establecería un antes y un después en el campo de la ciencia.
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